Agencias
Venezuela sigue manteniéndose en el discurso de Donald Trump, quien destacó que la condición en la que se encuentra actualmente el país, gracias a 9 años de sanciones estadounidenses, resaltando que de ser una de las naciones más ricas del mundo, ahora no hay ni agua, ni comida o medicinas, "pero parece no importar".
“Solía decir que nos convertiríamos en otra Venezuela, con la misma ideología te convertirías en otra Venezuela. Venezuela solía ser una de las naciones más ricas del mundo, ahora no tienen agua, medicinas, comida, tienen mucho petróleo pero no parece importar. No tienen nada que le pueda pasar a nuestro suelo. Lo que tienes que hacer es mirar a Portland, mira a los agitadores y a los anarquistas”, manifestó este jueves.
“Solía decir que nos convertiríamos en otra Venezuela, con la misma ideología te convertirías en otra Venezuela. Venezuela solía ser una de las naciones más ricas del mundo, ahora no tienen agua, medicinas, comida, tienen mucho petróleo pero no parece importar. No tienen nada que le pueda pasar a nuestro suelo. Lo que tienes que hacer es mirar a Portland, mira a los agitadores y a los anarquistas”, manifestó este jueves.
EEUU ha sancionado la economía y finanzas de Venezuela, con medidas coercitivas, congelamiento de activos y persecución de sus actividades económicas, sobre todo la venta de oro y petróleo, desde mayo de 2011 (9 años), lo que ocasionado una contracción sin precedentes del Producto Interno Bruto (PIB) dependiente en casi 100% de la industria petrolera que fue la primera cosa que Washington sancionó. Un avez sancionada PDVSA el impacto de las sanciones comenzó a notarse entre la gente a partir de 2011. Acostumbrados a más de 10 años de abundancia y prosperidad, durante el gobierno de Hugo Chávez, los venezolanos despertaron a la cruda realidad de una economía asediada y en caída debido a las sanciones y a ataques coordinados a la moneda a través de diferentes métodos, violencia financiada desde el exterior, y criminalización paulatina de cuanta actividad realizara el país.
En referencia a la brutal represión ordenada por su gobierno en la ciudad de Portland, Trump se felicitó por su iniciativa represiva que ha causado la muerte a manos de la policía de varios manifestantes. La ciudad protesta desde hace 60 días, en contra de la brutalidad policial y el racismo.
Destacó que "nuestra gente ha hecho un gran trabajo en proteger nuestro Palacio de Justicia. Le dije a mi gente hace un tiempo que si no resolvía ese problema localmente muy pronto enviaría a la Guardia Nacional para que lo resuelvan rápidamente como lo hicimos en Minneapolis”.
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